Sutra de las comidas
Nació, se iluminó. Enseñó, entró en Nirvana
Ahora abrimos los cuencos de la sabiduría. Que los donantes, receptores y ofrendas, sean liberados de sus apegos.
Desayuno: Esta comida de diez ventajas o beneficios, nos da bienestar físico y espiritual, promoviendo nuestra práctica.
Almuerzo: Esta comida de tres virtudes y seis sabores la ofrecemos a la sabiduría, al camino a la sabiduría y a los que siguen ese camino. A todas las manifestaciones de vida en los tres mundos.
1º Innumerables labores nos dan esta comida, debemos apreciarlos y agradecerlos.
2º Al recibir esta ofrenda debemos considerar si nuestra virtud y práctica la merecen.
3ª Buscamos la condición natural de la mente libre de apegos.
4º Libres de gula y codicia, tomamos estos alimentos para mantener la vida.
5º Para despertar a la verdad tomamos esta comida.
(Ofrecemos esta comida a todos los espíritus, llegará a todas partes.)
1º A la sabiduría, al camino a la sabiduría y a los que siguen el camino.
2º A todos los seres y todas las cosas.
3º Para transcender los seis estados de conciencia.
Por lo tanto, nos servimos esta comida junto a todos los seres, con la determinación de no tocar el mal ni aferrarnos al bien y estar siempre aquí y ahora.
El agua con que lavamos estos cuencos, sabe a ambrosía, la ofrecemos para liberarnos de los apegos.
En este mundo del vacío, existamos en el barro con la pureza del loto, que a pesar de tener las raíces en el lodo podrido, florece a la luz emitiendo belleza y un aroma delicioso. Nada sobrepasa la mente ilimitada, nos postramos ante la sabiduría.